Publicado en el Periódico
La Vega News en
En su edición de Junio
Opinión
Por: Antonio Peña
Mirabal
El 16 de agosto
próximo, se cumplirán 17
años de la salida del
Dr. Joaquín Balaguer del
gobierno, los cuales,
según la encuesta Gallup-
Hoy, no han sido
suficientes para el olvido, ya
que nuestro pueblo lo
coloca como el político
más admirado de los
últimos tiempos.
De esos 17 años, el PLD,
partido fundado por el Prof. Juan Bosch, cumplirá 13 al frente del gobierno, lo
que indica que si el PLD hubiese gobernado de acuerdo a las enseñanzas del
maestro, quien estaría en la mente de los dominicanos hoy día, sería el Prof.
Juan Bosch y no el Dr. Joaquín Balaguer.
No hay que olvidar
además,
que los 4 años
restantes para completar los
17, fueron gobernados
por el otro partido fundado por Bosch, pero al parecer, este también impuso
mucho del balaguerismo en su accionar gubernamental.
Ante la realidad
irrefutable del balaguerismo
sobre el boschismo
como práctica política en el
ejercicio del poder,
hay que reconocer que aquel “Frente Patriótico” que permitió el ascenso al poder
del PLD en 1996, terminó imponiéndole al PLD la preeminencia balaguerista en la
dirección del estado dominicano.
¿Era más fácil gobernar al estilo Balaguer que
al estilo Bosch? Entiendo que en el periodo 1996-2000 la incidencia del balaguerismo
tuviera presencia justificada en el gobierno del PLD, pero que se siguiera con
esta práctica en los periodos 2004-2012, no tiene justificación alguna.
Solo la
balaguerizacion del PLD explica los resultados de la encuesta Gallup- Hoy. Es
en este nuevo periodo de gobierno encabezado
por el Lic. Danilo
Medina, que el PLD
desde el poder,
empieza a ejercer una práctica
gubernamental más
parecida a Bosch que a
Balaguer.
Juan Bosch fue anti
clientelar, nunca estuvo
de acuerdo con esta
práctica como modelo ni
de subsistencia
económica, mucho menos
como medio para
garantizar adeptos políticos.
Creía en la generación
de fuentes de empleo
para que cada
dominicano obtuviera lo necesario para su sobrevivencia, no el parasitismo clientelar.
Bosch trabajó
incansablemente por la construcción de un partido político, donde el
sacrificio y la
entrega de su militancia fueran
sus estandartes, por
eso, cuando entendió que
el PRD ya no
representaba esos principios, no
lo detuvo la edad, y
con 64 años lo abandonó
para empezar a
construir el PLD. Pero lamentablemente el PLD en el ejercicio del poder ha sido
un impulsor del clientelismo al mejor estilo balaguerista, y es por ello esos
resultados de la Gallup-Hoy.
Juan Bosch fue un
político que dirigió todas
sus energías y
esfuerzos a servir a los demás.
Concibió la política
como medio para entregarse a los mejores intereses de nuestro pueblo.
Puso toda su
inteligencia al servicio de los que
menos pueden. Muchos
peledeístas, por el
contrario, llegaron al
gobierno para servirse
ellos, sin tomar en
cuenta las prédicas y prácticas del líder fundador, llegaron para servirse del
poder, al mejor estilo balaguerista, no para servir a los demás, como lo
hubiera hecho el Prof. Juan Bosch. Esto también tiene mucho ver con los
resultados de la Gallup-Hoy.
Juan Bosch fue un
político transparente,
ético, incuestionable
en el manejo de los recursos públicos. Denunció y persiguió el dolo y la corrupción
en todas sus manifestaciones, sin importar de quien se tratara, pudiendo ser un
político del patio o del exterior, poderoso, influyente, nunca temió en
denunciar a los corruptos.
No fue como Balaguer,
que admitió públicamente que la corrupción se detenía en la
puerta de su despacho,
con lo que reconoció
que en su gobierno, la
corrupción andaba por
doquier.
Es lamentable que la
mayor acusación que
se les hace a los
gobiernos pasados del PLD,
no al presente, sea el
de la corrupción. Y es
lamentable, porque eso
demuestra hasta
dónde ha calado en el
PLD su balaguerizacion,
ya que Balaguer al
admitir que la corrupción
llegaba hasta la
puerta de su despacho y
nunca tomar acción
sancionadora contra alguno
de sus colaboradores,
hacía una admisión
implícita de esta como
práctica política gubernamental.
Hay muchos dedos
acusadores, no
necesariamente
políticos, que desde nuestra
sociedad señalan a más
de un dirigente del
PLD involucrado en
actos dolosos, y que se
sepa, ningún
peledeísta ha sido expulsado del
PLD por corrupto, y
eso es balaguerismo, no
boschismo. Podríamos
llenar muchas cuartillas más demostrando que el accionar del PLD en el
poder, ha estado mucho
más cerca del balaguerismo que del boschismo, y de ahí esos
resultados que nos
trajo la Gallup-Hoy.
Es como si en estos
últimos periodos de gobierno, quien ha ejercido el poder hubiesen sido los discípulos
de Balaguer y no los de Bosch.
Por suerte para el PLD
y para el boschismo, el Lic. Danilo Medina ha dado demostraciones contundentes,
en apenas 9 meses de gobierno, de que el boschismo está presente en su gestión gubernamental.
Está presente, no solo
porque ha desmitificado
la figura
presidencial, tal cual lo hizo
Bosch, haciéndose
accesible al pueblo simple,
conversando y
escuchando a los trabajadores y
campesinos,
agricultores, estudiantes, etc. Con
acciones tan simples
como esas, Danilo se
asemeja a Bosch y
enaltece al boschismo.
No solo porque ha ido
en auxilio de los sectores
menos pudientes de
nuestra sociedad, haciéndoles visible ante las agencias gubernamentales responsables
de canalizar recursos en su auxilio, con esto, Danilo se asemeja a Bosch y enaltece
al boschismo. No solo porque ha frenado y expulsado de su gobierno a los que se
han atrevido a prestarse a actos dolosos, con esto, Danilo se asemeja a Bosch y
enaltece al boschismo.
También, porque cuando
le presentaron el
desastre de Bahía de
Las Águilas y lo bochornoso de la Barrick Gold, Danilo actuó como lo hubiese
hecho Bosch, que sin importar la magnitud de los intereses que afectaría,
decidió ponerse al servicio del pueblo dominicano.
De continuar como va,
y no hay razón para cambiar, Danilo hará el gobierno del PLD que más cerca de
Bosch ha estado, y eso no solo beneficiará abundantemente a nuestro pueblo,
sino que garantizará que al término de su gestión, los resultados de la
Gallup-Hoy colocarán en otro sitial al Prof. Juan Bosch.
